En el vasto y complejo entramado de la vida urbana, los Consejos de Participación Ciudadana (COPACI) del Estado de México emergen como un intento de puente entre la comunidad y el gobierno. Estos órganos, concebidos con la noble intención de fomentar la participación ciudadana, han sido testigos de luces y sombras en su trayectoria.

Lo Bueno y Lo Malo de los COPACI

Por un lado, los COPACI representan una oportunidad invaluable para que los ciudadanos se involucren en la toma de decisiones que afectan su entorno inmediato. La transparencia y la equidad de género son pilares fundamentales de estos consejos, promoviendo una representación justa y equilibrada. Sin embargo, la realidad a menudo dista de la teoría. La participación ciudadana, en muchos casos, se limita a la mera información, sin traducirse en un verdadero ejercicio de poder. La corrupción y la malversación de fondos han manchado la reputación de algunos COPACI, convirtiéndolos en instrumentos de control gubernamental y partidista.

El Interés de Líderes y Políticos

El interés de líderes y políticos en los COPACI no es casualidad. Estos consejos representan una plataforma estratégica para la proyección política y el control social. La posibilidad de influir en la comunidad a través de los COPACI es una tentación irresistible para aquellos que buscan consolidar su poder. No obstante, este interés no siempre se traduce en beneficios para la ciudadanía, sino en un uso instrumental de los COPACI para fines personales y partidistas.

El Gran Desinterés de la Ciudadanía

El desinterés de la ciudadanía en los COPACI es un fenómeno preocupante. La apatía y la desconfianza hacia las instituciones públicas han llevado a muchos a alejarse de estos órganos de participación. La percepción de que los COPACI son meros títeres del gobierno y la falta de resultados tangibles han contribuido a este desencanto. No nos damos cuenta que depende de la ciudadanía los buenos o malos resultados de estos organismos. Creemos que alguién va a resolver nuestros problemas, que a alguien más que a nosotros les interesan. Y eso, es mentira.

Un Llamado a la Acción

Es imperativo que la ciudadanía recupere su voz y se involucre activamente en los COPACI. La participación ciudadana es la piedra angular de una democracia vibrante y saludable. Solo a través del compromiso y la vigilancia constante, los COPACI pueden transformarse en verdaderos instrumentos de cambio y progreso. La comunidad debe asumir su responsabilidad y trabajar en conjunto para garantizar que estos consejos cumplan con su propósito original: ser un puente entre el gobierno y la sociedad, y no un obstáculo.

En palabras de Carlos Monsiváis, la participación ciudadana no es un lujo, sino una necesidad imperiosa para la construcción de una sociedad más justa y equitativa. Es hora de que la ciudadanía tome las riendas y transforme los COPACI en verdaderos agentes de cambio.

Un comentario en «Los  Copaci, ¿perjudican o ayudan a la ciudadanía?»

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